¿Cómo arreglar un sofá hundido?
Con el tiempo, los sofás van perdiendo capacidad de recuperación, lo que significa que se hunden fácilmente al sentarse en ellos o, peor aún, pierden toda la capacidad para volver a su posición original, incluso si no hay nadie sentado.
Por suerte, aprender cómo arreglar un sofá hundido es bastante sencillo, evitando los elevados costes de reparación profesional y, más importante aún, los de comprar otros nuevos.
Elementos necesarios para reparar un sofá que se hunde
- Tijeras o cutter
- Cinta métrica
- Grapadora o martillo
- Grapas o pequeños clavos para madera
- Una cincha nueva a medida (mejor que sobre a que falte)
- Una plancha de goma con medidas exactas (ni que sobre ni que falte)
¿Cómo arreglar un sofá hundido en 7 pasos?
Antes de continuar con esta guía debes saber que solo es válida para sofás con base de cinchas (bandas elásticas que soportan el peso). Si bien son menos comunes, hay otros con base de muelles metálicos que no se hunden, pero tienen el ocasional problema de que hacen ruido con el paso del tiempo.
Sin más, estos son los 7 pasos para arreglar tus sofás hundidos:
1. Quitar los almohadones y cojines del sofá
El primer paso para aprender cómo arreglar un sofá hundido es el más obvio de todos, pero no está de más tenerlo en cuenta para esas mentes que divagan demasiado. De igual modo, hay quienes cometen el error de creer que el hundimiento se debe al desgaste de los almohadones, que claramente es un factor a tener en cuenta, pero no algo determinante.
Si compras nuevos almohadones te encontrarás con la sorpresa de que el sofá aún se hunde. Entonces, lo que debes hacer es quitar los que ya tienes y guardarlos mientras sigues con el resto de pasos, porque esos mismos te servirán sin necesidad de gastar en otros.
2. Recortar el material textil y la gomaespuma que cubren las cinchas
Sin los almohadones, quedará expuesta una tela que se extiende más allá de los bordes internos del sofá, por lo que no es posible quitarla completamente. En su lugar, hay que recortarla utilizando unas tijeras o un cutter. El recorte se hace únicamente en la parte de atrás y en los costados, de ese modo podrás llevar la tela hacia adelante del sofá.
Hecho esto, encontrarás una plancha de goma cubriendo las cinchas, que es hasta donde hay que llegar. Esto significa que también hay que cortarla de los bordes para sacarla, esta vez sí por completo. Para lograrlo, puedes usar las mismas tijeras o cutter que con la tela.
3. Tomar las medidas para una gomaespuma y una cincha nuevas
Saber cómo arreglar un sofá hundido lleva implícito reconocer una mínima inversión monetaria en al menos un par de materiales: una gomaespuma y una cincha nuevas. Pero esto no sería posible sin antes saber qué cantidad necesitas de cada material.
Ahora que las cinchas originales están descubiertas, emplea una cinta métrica para medir cada una. Luego suma de 1 a 1.5 metros adicionales para saber la cantidad que necesitas comprar. La gomaespuma nueva sí que debe tener medidas exactas (largo x ancho), con un grosor de al menos 3 centímetros.
Ambos materiales se consiguen fácilmente en internet y en tiendas de bricolaje. La cincha se obtiene como una cinta única, y no en pequeñas porciones cortadas como las que ves en tu sofá.
4. Agregar cinchas nuevas sin eliminar las viejas
Si presionas las cinchas originales del sofá, notarás que están muy blandas y se hunden fácilmente. Esta es la raíz del problema, no los almohadones, y es completamente natural que con el tiempo se vuelvan más flexibles, perdiendo rigidez o capacidad de recuperación.
Sin embargo, seguirán aportando algo de apoyo, por lo que no es necesario quitarlas. Un dato esencial para conocer cómo arreglar un sofá hundido es que generalmente las cinchas están instaladas con una separación de entre 3 a 5 centímetros entre ellas, y es en estos espacios donde tendrás que grapar o clavar las nuevas cinchas.
Empieza clavando o grapando un extremo de la cinta en la parte de atrás, luego estírala con fuerza hacia adelante manteniendo la tensión mientras aseguras el extremo delantero. Corta la cincha en ese extremo y repite el proceso hasta llenar toda la base del sofá.
También es recomendable instalar cinchas en forma de X, donde cada par ocupa la plaza de un almohadón. Es decir, que para un sofá de tres almohadones, se instalarán tres pares de cinchas cruzadas.
5. Poner la gomaespuma nueva sobre las cinchas
La nueva plancha de espuma es mucho más fácil de instalar, dado que solo necesitas ponerla sobre las cinchas asegurándote de que no sobresalga en el borde delantero del sofá o, de lo contrario, se podrá ver debajo de los almohadones. Para fijarla a la madera basta con poner algunos clavos o grapas en los extremos.
6. Volver a clavar la tela atrás y en los laterales
Estamos cerca del final de esta guía sobre cómo arreglar un sofá hundido, y ahora es momento de cubrir la gomaespuma con el mismo material textil recortado, grapándolo o clavándolo en la parte trasera y en los costados para que vuelva a quedar fijo en la madera del sofá. Es importante estirarlo bien para que no queden pliegues ni mayores imperfecciones.
7. Poner los cojines y disfrutar una buena peli
En este punto es probable que el material textil al descubierto luzca antiestético, sobre todo en los bordes laterales y atrás. Pero no importa, porque al poner nuevamente los almohadones esto no se notará en lo absoluto.
Lo que sí vas a notar es que tu sofá deja de hundirse cuando lo usas, incluso si tienes algo de sobrepeso o si se sientan varias personas a la vez. Todo sin necesidad de gastar considerables sumas de dinero en manos profesionales ni mucho menos en comprar uno nuevo.